martes, 21 de junio de 2011

004

Ahora que el tiempo ha pasado,
vuelve una y otra vez la misma obsesión: ¿te quedarías conmigo?;
no sé qué parte de mi sonrisa no entiendes,
te juro que trato de arrancar esta sucia desesperación de mi carcajada,
pero se clava en mí como el inútilmente soñado sabor de tu perfume:
violencia e incienso, oscuridad y belleza.]

Estoy perdido desde hace ya tanto tiempo que no recuerdo la verdad,
un abismo de luto circense desdibuja el camino a tus labios,
quiméricas, resplandecientes ruinas de este esquizofrénico test de Rorschach
al que ya no me atrevo a nombrar vida:]
emborracharme para buscar inútilmente tu propia voz en mi llanto:
nunca quisiste mirarme, nunca me sonreíste, nunca te hice reír.

¿Si todos se fueran, te quedarías sentada a mi lado?,
¿si no me escucharas, te acercarías para que te susurrara al oído?,
¿sabrías caminar a mi lado?.

Quisiera desaparecer infinito en tus ojos, mirarte mientras nievas felinamente,
escapar juntos de cuanto nos rodea o nos hace cínicos y felices,
tan sólo estar a tu lado mientras todo se derrumba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario