miércoles, 25 de julio de 2012

Miedo

El miedo es la palabra,
la duda enroscada en mi garganta:
el miedo a lo que dices y a lo que callas.
El miedo y tan sólo bajar la mirada,
el miedo de los demás ojos, de las lágrimas:
el miedo que corroe mis entrañas.
El miedo ante cada nuevo camino,
ante tan sólo el destino:
el miedo de perderme en el olvido.
El miedo que ya no lleva a nada,
a volver la vista atrás:
a descubrir más miedo en más palabras.
El miedo a cada noche y cada nueva mañana,
el miedo que se retuerce en mi almohada:
la misma pesadilla de madrugada.
El miedo al silencio,
a la conversación,
el miedo a la espera,
el miedo al final.

martes, 17 de julio de 2012

Mi vida en tu vida

Quiero que conviertas mi vida en tu vida,
y que transformes mis días en tus días,
tus noches en mis noches,
quiero encontrar mi camino en tus huellas,
y que tus huellas se mezclen con las mías.
Quiero que conviertas mi vida en tu vida,
y que el mundo se pare a escucharnos respirar,
quiero que todas las camas sean nuestras,
que todas las sonrisas sean tuyas,
y que mi sonrisa salga con la tuya a pasear.
Quiero que conviertas mi vida en tu vida,
y estar en cada lugar en el que has estado,
y oler cada flor que hayas olido,
quiero encontrar la manera de agarrar tu mano,
quiero besarte, perderme contigo.

domingo, 8 de julio de 2012

El mundo

El mundo es de los gatos, me dijo, sonriendo, mientras se iba;
y lo dibujó en tiza amarilla y blanca:
yo lloré, y le dije lo orgulloso que me sentía,
lo mucho que la echaría de menos, lo mucho que la quería.
El mundo es de los gatos, me dijo,
y siento rabia, pero sobretodo pena, de que seamos el enemigo,
y siento rabia, pero sobretodo pena, de no seguir peleando juntos.
Ahora repaso con los dedos sus huellas,
sus últimos nombres escritos a bolígrafo,
sus últimos dibujos y notas, sus últimas canciones, sus pasos,
el sonido de su sonrisa.
El mundo es de los gatos, me dijo, y la creí sobre todas las cosas,
como cuando dice que me quiere y me desea,
como cuando dice que jamás estoy solo:
mañana la vida pierde parte de su sentido,
para reencontrarlo de mil maneras distintas.
El mundo es de los gatos, y maúllan cuando escuchan tu nombre,
y yo ardo, sonrío, sueño, escribo,
el mundo es de los gatos,
y aunque a veces me odia, está aprendiendo a quererme.
El mundo es de los gatos, me dijo, mientras me besaba en el puente,
sobre el río y las leyendas, y las fotografías cobrando vida,
el mundo es de los gatos como tú y como yo,
volviéndonos cien animales distintos para cada ocasión:
durmiendo a tu lado, el mundo es nuestro.